La corrupción es un tema que lamentablemente lacera la salud de una sociedad; por lo que, es necesario enfrentarlo valientemente si queremos salir de la crisis actual. Somos testigos recientemente de los “tweets” del presidente Donald Trump, donde afirma que los “políticos puertorriqueños no solamente son corruptos, sino también incompetentes”; a partir de estas declaraciones surge una pregunta básica: ¿Solamente es el estilo de Mr. Trump o es que se le ha dado más que motivos, para que afirme lo dicho?

Luis Lasalle, en su tesis del MBA estudió y midió la percepción de la corrupción donde participé como su mentor. Su motivación personal del estudio era -según manifiesta- que todos hablaban de la corrupción, pero que nadie había cuantificado la percepción que tienen los boricuas sobre cuál de las agencias públicas eran las más corruptas, independientemente del partido político que estaba en el poder. El estudio se llevó a cabo con toda rigurosidad académica y científica: se utilizó una muestra representativa de 475 participantes, se elaboró un cuestionario propio validado por tres expertos de 34 preguntas en una escala Likert del 1-7, su consistencia interna arrojó 0.83/1.00 y usando análisis de frecuencia se obtuvieron los resultados.

Los hallazgos fueron contundentes: Un 94% de los encuestados perciben que en PR hay un marcado problema de corrupción gubernamental!, por lo que amerita que la sociedad y sus clases dirigentes atiendan urgentemente este problema. Cuando se desarrolló la pregunta: ¿En cuál de los 14 sectores considera que es más visible el problema de corrupción? La respuesta fue reveladora, los partidos políticos ocuparon el primer lugar con un 96% que contestaron estar de acuerdo, 3% opinaron “ni de acuerdo ni en desacuerdo” y solo el 1% contestó que no. Es decir, solo 1 persona de 100 encuestados cree que no hay corrupción en el gobierno independientemente de su afiliación política y partido que esté en el gobierno; la segunda posición fue para la Autoridad de Energía Eléctrica, en donde el 96.3% contestaron que percibían corrupción, el 3.2% contesto de “ni de acuerdo, ni desacuerdo” y solo el 1,4% no cree que existe corrupción en esa entidad. A la luz de estos resultados urge que estas instituciones deben cambiar radicalmente, para que la percepción cambie positivamente tanto internamente como externamente. En el lado de las agencias menos corruptas se ubicaron la agencia estatal de manejo de emergencias y el departamento de la familia con una media de 4.28 y 5.21 de una escala de 7. Estos resultados basados en metodología científica traen a debate y reflexión que el pueblo a pesar de sus convicciones políticas; perciben que estas entidades independientemente del color partidario no actúan correcta y éticamente.

Luego, el investigador estudio sobre las consecuencias de la corrupción y los resultados más relevantes fueron: el 95% de los encuestados piensan que la corrupción ha contribuido a la crisis económica actual; la segunda es que, los servicios públicos se ven afectados con un 93.6% y la tercera afirmaron que la corrupción afecta principalmente a la juventud en Puerto Rico con un 91%.

A pesar de estos resultados negativos, cuando se exploró si la corrupción tenía algún efecto sobre los nuevos emprendimientos en PR, las premisas más importantes fueron: el 79.3% no cree que la corrupción es el único medio de tener éxito en algún emprendimiento; el siguiente resultado fue que el 77.8% cree aún, que la generación de nuevos emprendimientos se debe a sus capacidades y no a variables relacionados con la corrupción. Por los resultados, creemos que un país emprendedor es vital para el crecimiento de PR. Sin embargo, es importante comentar que el 80.2% de encuestados opinaron que los niveles de corrupción gubernamental incentivan de alguna manera a los emprendedores en iniciar sus negocios informalmente; es decir si no atacamos el problema de la corrupción tendremos más crecimiento de la informalidad.